Monstruo indomable que extiende su sombra, oscuridad que esparce sin cesar lágrimas y desconsuelo. Miradas esquivas, testigos inmóviles del miedo. La enfermedad se propaga como fuego voraz, devorando sueños y dejando cicatrices en su estela de incertidumbre.
📋 Una epidemia es la propagación de una enfermedad contagiosa, generalmente una enfermedad infecciosa.
Se le llama brote epidémico si la propagación es superior a la esperada en situaciones normales. Y pandemia si su extensión geográfica incluye varios países o continentes.
Puede que pienses que contraer una enfermedad al mismo tiempo que otras tantas personas no tiene nada que ver con las emociones que vives; y considerar que una epidemia se resume a algo puramente estadístico. Sin embargo, si lo piensas bien, entenderás que sois muchas personas viviendo situaciones similares.
Puedes vivir, igual que ellos, inseguridad personal y/o colectiva, referente a la política, la economía, el entorno, ... o puedes estar experimentando, como tantos otros, ira, miedo, culpa, estrés, ....
Los virus circulan por los 'campos morfogenéticos' , porque un 'virus' es energía codificada y los campos transmiten información.
La epidemia se produce como resultado de una sociedad enferma que se refleja en cuerpos enfermos, y que propaga energéticamente las partes de la enfermedad por doquier.
La causa de una epidemia (paquete de información) se propaga y se contagia al entrar en resonancia con energías afines de esa vibración, ocasionando la enfermedad. La enfermedad constituye en sí un proceso de transmutación y de transformación.
La contingencia de la enfermedad brinda una ocasión para reflexionar, meditar e interiorizar, aceptar, soltar, evolucionar.
Algunos ejemplos históricos:
La plaga de Atenas, 430 a. C.
La peste antonina, 165-18.
La peste de Justiniano o primera peste bubónica, comenzó en 541.
La peste negra o segunda peste bubónica, comenzó en el siglo XIV.
El tifus, durante las Cruzadas.
La viruela y el sarampión, América 1492-1898.
El sudor inglés, siglo XVI.
El cólera, siglo XIX.
La gripe rusa, 1889-1890.
La gripe española, 1918-1919.
La gripe asiática, 1957.
La gripe de Hong Kong, 1968.
La gripe rusa, 1977.
El VIH o SIDA,1981-.
El síndrome respiratorio agudo severo o SARS, 2002.
La gripe aviar, cepa H5N1, 2004-2006.
La gripe A o H1N1, también conocida como gripe porcina, 2009-2010.
El ébola, 1976-2016.
El COVID-19 o SARS-CoV-2, 2019-mayo 2023.
La viruela del mono (mpox), julio 2022-mayo 2023.
La naturaleza de la enfermedad te indicará el aspecto de tu vida que necesita o requiere de una toma de consciencia.
Los campos morfogenéticos son campos invisibles que existen en el mundo natural y en los organismos vivos, y que contienen información organizadora que determina la forma, el comportamiento y el desarrollo de los sistemas biológicos.
El biólogo y filósofo inglés Rupert Sheldrake sugiere que estos campos morfogenéticos actúan como una especie de 'memoria colectiva' que influye en el desarrollo y la evolución de los sistemas biológicos, incluyendo plantas, animales y seres humanos. Esta teoría propone que la forma y el comportamiento de un organismo están influenciados por información que se encuentra en estos campos morfogenéticos, y que los organismos pueden transmitir información a través de estos campos, lo que puede afectar a la evolución y el desarrollo de otros organismos.
En resumen, los campos morfogenéticos son un 'campo de memoria' que permiten la transmisión de información entre organismos de la misma especie sin mediar efectos espaciales, pues es un vínculo que actúa instantáneamente en un nivel subcuántico.
Desencripta la enfermedad, descodifica tu realidad.
Tu respuesta personalizada a través de la discovery sesiön - lectura del alma, la forma más inequívoca de tomar consciencia y hallar respuestas.
La alternativa es la toma de conciencia.