Las nalgas (glúteos, culo) son la parte carnosa del cuerpo sobre la que te sientas, tomas lugar, tu lugar (tu poder).
Cuando aprietas las nalgas o cuando caminas con las nalgas apretadas, te sientes amenazad@, tienes miedo de perder el control (retienes). No deseas ser observad@ porque esto podría llevarte a cambiar, a aceptar las cosas, acontecimientos o situaciones que no estás dispuest@ a asumir.
Incluso con las nalgas apretadas, puedes pretender que todo va bien y seguir sonriendo.
Si caminas con las nalgas muy sueltas, con un balanceo de las caderas muy pronunciado, tomas el lugar, el tuyo y el de los demás. Amas el poder, porque dirigiendo te aseguras el control y no necesitas cambiar: intentas obligar a que cambien los demás.
¿Qué tal empezar por tomar conciencia de que estás enganchad@ a tu pasado, a tus ideas, a tus viejas heridas? Puede que incluso estés viviendo con rencor o ira.
¿Cómo sería aceptar soltar e ir hacia delante y abrirte a las nuevas experiencias de la vida?
Desencripta la enfermedad, descodifica tu realidad.
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