Tus manos son un milagro de la naturaleza, un instrumento divino de creatividad, una herramienta de expresión y comunicación, y una extensión de tu ser en el mundo.
Son un mapa de tu historia y experiencia, una obra de arte anatómica y funcional, una fuente de destreza y habilidad, y un recordatorio de tu humanidad.
Tus manos son el puente hacia el mundo, la conexión entre tu ser y la realidad, una ventana a tu esencia y tu alma, y una expresión de tu voluntad y tu propósito.
Son un recordatorio de tu poder y tu capacidad, y de tu capacidad para moldear el mundo a tu antojo.
Tus manos son un poema de movimiento y belleza, una sinfonía de texturas y sensaciones, una expresión de tu amor y tu cuidado, y una bendición en cada momento de tu vida.
La 'mano del hombre' moldea, da forma, comunica.
▸ Las manos representan tu capacidad para coger/tomar, dar o recibir.
Son la íntima expresión de ti en el Universo y 'el poder de tocar' es tan grande que te sientes impotente cuando tus manos resultan lastimadas. Tienen un carácter único: igual como tus huellas digitales, simbolizan tu pasado, tu presente y tu porvenir.
Entre las manos tienes las situaciones de tu vida diaria y el estado de tus manos manifiesta en qué medida captas tu realidad, cómo expresas tanto tu amor como tu odio.
Si tienes las manos frías, te 'retiras emocionalmente' de una situación o de una relación en la que estás implicad@. Puede que simplemente rechaces cuidar de tus propias necesidades básicas y te dejes de lado a ti mism@.
Las manos húmedas te indican excesiva angustia y nerviosismo. Estás 'desbordad@' por tus emociones, sintiéndote quizás demasiado implicad@ en cierta situación.
Si tienes dolor o rampas, es porque 'te niegas' a ser flexible frente a las situaciones presentes.
Podrías preguntarte qué es lo que te molesta o qué es lo que no quieres llevar a cabo. Puedes incluso experimentar un sentimiento de incapacidad o vivir un gran miedo al fracaso.
Esto te lleva a 'querer controlarlo o poseerlo todo con tus propias manos' (evitar a toda costa que se te 'escurra entre tus dedos').
Cuidado, porque esta actitud puede degenerar en artritis (asociada con la crítica, el autocastigo, la reprobación y una carencia profunda de amor).
Si te hieres las manos, quizás te resistas 'al tacto' que puedes dar o recibir de otra persona. Este temor a entrar en contacto puede vincularse a un suceso presente que te recuerda un abuso vivido en el pasado.
La parálisis de las manos puede producirse después de una actividad mental muy intensa unida a los sentimientos de sobreexcitación y contrariedad. Quizás incluso, tienes ganar de 'torcerle el cuello' a alguien 'con tus propias manos'. O puede que temas llegar a sentirte 'paralizad@' en una situción o una tarea.
Recuerda que los dedos de tus manos son una prolongación (de tus manos). Son el instrumento que se utiliza para manifestar tus acciones en el día a día. Representan la acción en el momento presente, los detalles de la vida diaria.
¿Qué te parece empezar por aprender a soltar y a 'tender las manos' hacia el cielo, tomando conciencia de que el único poder real que tienes es sobre ti mism@?
¿Crees que podrías dejar de dar el poder a los demás? ¿Dejar de sentirte 'mal amad@' o de sentirte 'víctima de la vida'? Aceptar amarte realmente y perdonarte, porque si tú no te quieres a ti mism@, ¿Cómo puedes pretender que te amen los demás?
Desencripta la enfermedad, descodifica tu realidad.
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La alternativa es la toma de conciencia.