Tu estómago es el saco de los deseos, el lugar donde se mezclan las pasiones, donde se transforman los sabores en sueños y se alimenta el fuego de las emociones.
Es un escenario de rituales cotidianos, de encuentros y desencuentros con la vida, donde se experimenta el placer de los sentidos y se aprende a digerir las penas y las alegrías.
Es el hogar de las mariposas del amor, de los nervios que hacen vibrar las tripas, donde se acunan los misterios del sabor y se saborean las delicias y las golosinas.
Tu estómago es un universo gastronómico, una fuente de energía y vitalidad, que te recuerda cada día que eres cósmico y que mereces disfrutar con intensidad.
El estómago recibe el alimento y lo digiere para así poder colmar las diferentes necesidades de tu cuerpo en vitaminas, en proteínas, ...
Alimentas tu cerebro del mismo modo con las situaciones y con los acontecimientos de tu vida.
No hay dos estómagos iguales. La digestión es diferente de una persona a otra, porque la forma en la que trabaja tu estómago está relacionada con tu personalidad.
▸ Tu estómago refleja ...
El modo en que absorbes e integras tu realidad, y
Tu capacidad para digerir las nuevas ideas o las situaciones de la vida.
Puede compararse con un barómetro indicando tu grado de apertura y tu modo de reaccionar ante la vida.
Los problemas de estómago aparecen cuando tu realidad cotidiana está en conflicto con tus deseos y tus necesidades. Podrás reconocer fácilmente estos conflictos en tus relaciones familiares, tus amistades o en tus relaciones de trabajo.
Los calambres en el estómago suelen estar vinculados a una necesidad de amor o de ‘alimento emocional’. El alimento aquí representa el afecto, la seguridad y la supervivencia.
Si experimentas un vacío en tu vida, en particular tras una separación, divorcio, muerte, pérdida o escasez de dinero, querrás colmarlo con ‘alimento’, pues puede ayudarte a ‘liberarte artificialmente’ de las tensiones.
Cuando no quieres enfrentar ciertas emociones las pones de lado, pero estas siguen así, siempre presentes, se acumulan y ‘fermentan’ provocando gases.
Las úlceras y los ardores de estómago aparecen cuando rumias ciertas situaciones del pasado que ‘no acabas de digerir’ o reprimes ciertas emociones o contrariedades en tu interior.
Si hay una situación de tu vida que ‘no digieres’ y te hace vivir gran inquietud, sobre todo debido a tu débil autoestima, tus dificultades para aceptar tus emociones harán que tu estómago se tense y se fragilice, tu digestión se volverá lenta y pesada.
Los dolores de estómago se relacionan con contrariedades en el campo de las finanzas personales o en tu vida profesional.
Si esa situación que no eres capaz de digerir se vuelve más y más intensa, podrías desarrollar un cáncer de estómago.
¿Qué tal empezar por tomar conciencia de que es tu grado de apertura frente a la vida lo que determinará la tensión que vas a experimentar en tu día a día?
¿Crees posible transformar las experiencias en sabiduría, a través de la aceptación?
Desencripta la enfermedad, descodifica tu realidad.
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